La emoción se me nota hasta en los poros,
Los ojos llorosos,
Mis mejillas tensas de la felicidad,
no paro de reír y reír.
Me trajiste el regalo más maravilloso,
la conciencia de estar vivos.
Eres el sueño de mi vida,
Hecho realidad, hecho carne, hecho ser,
Mi corazón se desprende de mi y te hace móvil,
soñador, pensante y dueño de mí.
Estoy ansiosa de conocer el mundo a través de tus ojos,
Que me recuerdes la belleza de la simpleza,
Que me traigas la maravilla día a día.
La que la prisa me ha quitado,
La que la vida me ha querido borrar,
la que cubre mi ansiedad.
Quiero que me dejes boquiabierta,
sorprendida de verte tan tú,
tan sabio a tu corta edad,
tan a tu manera.